El plástico es un material altamente resistente a la degradación; una botella de PET puede tardar más de 150 años en descomponerse. Durante este extenso período, los plásticos se fragmentan en microplásticos, partículas menores a 5 mm que contaminan suelos y cuerpos de agua. Estos microplásticos son ingeridos por diversas especies acuáticas, afectando su salud y, potencialmente, la nuestra.
Acciones para Reducir el Desecho de Plásticos
Como consumidores responsables, podemos implementar las siguientes prácticas:
- Separación en Origen: Clasificar los plásticos en casa, asegurándonos de que estén limpios y secos antes de desecharlos.
- Compactación: Aplastar botellas y envases plásticos para optimizar el espacio en los contenedores de reciclaje.
- Puntos de Reciclaje: Identificar y utilizar los centros de acopio de plásticos cercanos a nuestro domicilio. Muchas ciudades cuentan con estos espacios destinados a la recolección y reciclaje de materiales plásticos.
Tu Compromiso Marca la Diferencia
Implementando estas acciones, contribuimos a la reducción de residuos plásticos, promovemos la salud de nuestros ecosistemas acuáticos y fomentamos una cultura de responsabilidad ambiental.
¡Actuemos hoy por un mañana más limpio y sostenible!